Ahora está aquÃ, el inicio del invierno: febrero siempre ha sido duro. Pero quien se lo toma con más tranquilidad son los caballos. A pesar de la nieve en la espalda y allà se puede ver de nuevo lo bien que aÃsla el pelaje del caballo, se come con deleite. Todos los caballos en sus boxes están bien y también los caballos pensionistas y el frio y la nieve no les molesta en absoluto.
Por supuesto, el payaso Morfeo tiene que tomar unos bocados del esplendor blanco. Nunca lo ha visto de AndalucÃa, de donde viene, y ahora también sabe que no gusta bien.
Mientras tanto, el entero Deadalus disfruta de un extenso baño de arena. ¡Oh, un domingo de invierno asà es maravilloso! Idilio puro, animales relajados, todo el mundo lo está haciendo más que bien.