Farolero llegó a nosotros directamente del criador en España con 4 años como caballo de monta y de venta. Aunque su viaje con nosotros no siempre fue fácil, creímos firmemente en él y reconocimos sus cualidades.
Así lo confirman ahora las maravillosas fotos de las primeras «vacaciones» de Borkum y Farolero y su visita a la playa. ¡Qué gran caballo, qué calcetín más chulo!
Así que, queridas personas, ánimo con los caballos jóvenes. Un joven español aprende rápido, es curioso y, sobre todo, extremadamente lúcido.